Los fuegos artificiales son un elemento recurrente en muchas celebraciones a lo largo del año, pero especialmente en diciembre. Sin embargo, cualquier persona que tenga mascotas se habrá dado cuenta de que muchas de ellas lo pasan mal en estas fechas, porque la pirotecnia puede ser una gran fuente de estrés, sobre todo para perros y gatos.
En general, las mascotas pueden temerle a rayos, explosiones de cohetes o pirotecnia, vientos fuertes, lluvias intensas o música a alto volumen, a tal grado que puede ocasionarles estrés, fobias y problemas de salud.
¿Por qué les afecta el ruido de los fuegos artificiales a las mascotas?
Los perros y gatos tienen un sentido del oído mucho más desarrollado que los humanos. Pueden percibir sonidos a frecuencias más altas y con mayor intensidad. Un ruido fuerte como el de los fuegos artificiales, que para nosotros puede ser molesto, para ellos es ensordecedor.
Otro elemento que los altera es que son impredecibles en intensidad y duración. Esto activa su instinto de supervivencia, ya que los identifican como una amenaza y su instinto es intentar huir o defenderse.
¿Qué tanto puede afectar el ruido a las mascotas?
Cada mascota reacciona diferente al ruido de los fuegos artificiales. Algunas muestran signos muy sutiles de inquietud, como una postura tensa o jadeos; mientras que otros pueden experimentar miedo extremo. En esos casos, maúllan o ladran de forma excesiva para mostrar su incomodidad, tratan de esconderse o pueden llegar a perder el control.
Una respuesta fóbica ante sonidos estruendosos provocados por cohetes o música a alto volumen puede manifestarse cuando rascan puertas y ventanas intentando huir de la situación. En ocasiones, pueden volverse agresivos, tener un comportamiento destructivo o llegar a lastimarse a sí mismos o a las personas que los rodean.
Cuidados para tu mascota durante las fiestas de fin de año
Si tu mascota sufre de miedo excesivo o fobia a ruidos como el de los fuegos artificiales, existen algunas recomendaciones que puedes seguir:
- Crea un espacio en casa donde tu mascota se sienta protegida (un refugio), como una habitación con luces tenues, con la televisión encendida o ruido blanco para amortiguar los sonidos externos.
- Reduce el ruido exterior cerrando puertas y ventanas. También puedes usar cortinas gruesas para disminuir los destellos de luz.
- Nunca dejes a tu mascota en el jardín o en espacios abiertos durante los fuegos artificiales. Evita llevarla a lugares donde haya mucha gente, ya que podría entrar en pánico y tratar de huir, con el riesgo de perderse, lastimarse o lastimar a alguien.
- Evita castigarla o reconfortarla en exceso. Lo mejor es que le des su espacio y permitas que busque la manera de sentirse más cómoda.
- Existen productos como difusores de feromonas para gatos y perros que ayudan a reducir el estrés. Consulta con tu médico veterinario antes de usar cualquier producto.
- Un juguete interactivo con premios puede desviar su atención del ruido.
- En temporadas donde habrá más estrés por la pirotecnia, puedes incrementar el ejercicio que haces con tu mascota (aunque sea jugar en el interior de la casa), esto les ayudará a relajarse, pues habrán liberado endorfinas y tendrán cansancio suficiente para dormir.
Si el miedo es excesivo y el problema se ha vuelto crónico, puede mostrar reacciones exageradas y generar problemas de comportamiento, incluso ante otros tipos de ruidos.
Al detectar una fobia a sonidos fuertes, es importante buscar la ayuda de un profesional o etólogo. El uso de cualquier producto, incluso si es natural, debe ser bajo prescripción de un médico veterinario.
Finalmente, siguiendo estos consejos, puedes ayudar a que tu mascota pase las fiestas de fin de año con mayor tranquilidad y seguridad.