MV Esp. Dip. Adriana Castrejón V
Hospital Veterinario UNAM-Banfield
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Ahora que ha llegado que ha llegado la primavera y se aproxima la temporada de calor es importante que, como dueños responsables, conozcamos las verdades y mitos del efecto del calor en nuestras mascotas, así como las enfermedades relacionadas con este tema.

Choque calórico - es verdad.

El choque de calor es originado por un aumento excesivo de la temperatura corporal, en donde intervienen varios factores que resultan de una lesión térmica directa sobre los tejidos. Debemos saber que a diferencia de los seres humanos, los perros y gatos no sudan para disipar el calor. La sudoración en éstos es limitada y escasa, por este motivo no pueden regular fácilmente la temperatura corporal.

A una temperatura tan elevada como 43º C, además de sufrimiento en el animal, se altera la integridad de las membranas celulares, ocasionando deterioro de los órganos y trae como consecuencia un mal funcionamiento de los mismos. Los sistemas afectados son el sistema nervioso central (SNC, que está compuesto por el cerebro, tallo cerebral y el cerebelo), gastrointestinal (el cual involucra al estómago y los intestinos), el cardiovascular (que comprende el corazón y los vasos sanguíneos), el hepatobiliar (que se refiere al hígado y sus conductos), así como el renal, el hematológico (que consta de los glóbulos rojos, blancos y plaquetas) y el muscular.

Los efectos de un exceso de calor en el SNC son edemas (infamación) cerebrales; también se pueden presentar hemorragias, las cuales pueden generar desde convulsiones hasta muerte neuronal. En el apartado gastrointestinal se producirá ulceración, ocasionando en los pacientes vómitos con o sin sangre y melena (sangre digerida en heces). Las lesiones al miocardio (musculo del corazón) producirán taquicardias (un aumento en la frecuencia cardiaca), así como arritmias, y por último, un choque cardiogénico (que se refiere a la pérdida de la función del corazón; así como una baja de la presión sanguínea).

Por otra parte, la insuficiencia renal aguda es común sobre todo en aquellos animales deshidratados. También podemos encontrar activación dentro del sistema vascular de los factores de coagulación que lleva a la formación de microcoágulos que afectan todo el sistema y la producción de hemorragias.

Factores que favorecen el choque de calor. . Es muy importante enfatizar que en mayor o menor medida, todos estos cambios y otros más pueden afectar a nuestra mascota de por vida o lamentablemente llevarla a la muerte. Los factores predisponentes para que ocurra el choque calórico van desde la falta de adaptación al medio ambiente (por ejemplo, perros de pelo abundante que se llevan a vivir a un clima cálido), la humedad y calor excesivos, o simplemente la privación de agua.

Pero también afectan factores como la obesidad, el ejercicio (excesivo o realizado cuando la temperatura se eleva o el sol está en lo más alto), así como enfermedades preexistentes como: cardiovasculares, SNC, de vías respiratorias altas como la parálisis laríngea y lesiones en los centros de la termorregulación. Las razas braquicefálicas (por ejemplo, Bóxer, Bulldog Inglés, Bulldog Francés, Pug, Boston Terrier, Pekines, entre otros) también son susceptibles.

Precauciones y recomendaciones. El evento más común por el que los perros sufren choque calórico es el dejarlos encerrados en el automóvil, incluso por periodos cortos, así como ejercitarlos sin que tengan momentos de descanso en sombra o sin acceso al agua.

Si tu mascota estuvo expuesta a estos eventos y además notas jadeos excesivos, membranas mucosas como las encías de color rojo brillante, petequias (puntitos rojos) en piel o encías, vómitos, ataxia (incoordinación al caminar), alteración en su estado mental, temblores musculares o incluso convulsiones, acude de manera urgente al hospital veterinario.